En un análisis del 2021 hecho por Confcommercio, los empresarios turísticos difundieron datos sobre un año “desastroso” y pidieron ayuda al Gobierno.
Según los datos difundidos por la patronal empresaria, este año se registraron 60 millones de arribos menos que en 2021 y 120 millones de presencias menos. Incluso hubo 13 millones de viajes menos de italianos al exterior.
Los datos coinciden con diversos informes que vienen alertando, desde 2020, sobre los efectos de la pandemia en este sector. Incluso los anuncios sobre la vuelta de los viajes se vieron limitados por las nuevas cepas y oleadas del COVID-19.
Los empresarios turísticos advierten además que la recuperación queda pendiente para el verano de 2022. Es decir que la crisis se alarga ya más de 30 meses desde el comienzo de la pandemia, más allá del enorme potencial de Italia para recuperarse en este sector.
El sector pide “más apoyo, la extensión del fondo de despido y moratorias fiscales adecuadas”, según Carlo Sangalli, presidente de Confcommercio. “Una economía italiana sin la fuerza motriz fundamental del turismo es impensable”, consideró.
El dirigente empresario señaló que las cancelaciones de los viajes de Navidad también golpearon al sector. Se registró un crecimiento “exponencial en los últimos días de cancelaciones en la restauración”. Ello se suma a “la dramática situación en el sector del entretenimiento con el cierre de actividades”.
“Es claro que el Gobierno debe apoyar a estos componentes del sector turístico”, lanzó. Ese apoyo debería traducirse en “medidas sobre redes de seguridad social, sin aumentar los costos para las empresas, y sobre el acceso al crédito, pero también intervenciones fiscales y contribuciones no reembolsables basadas en las pérdidas sufridas”.