La principal conclusión del estudio que se realizó sobre el cuerpo del diplomático y su escolta coincide con el relato de un intento de secuestro.
La autopsia realizada en el Policlínico Gemelli de Roma aseguró que el embajador italiano en la República Democrática del Congo Luca Attanasio y su escolta Vittorio Iacovacci no fueron ejecutados.
Ambos recibieron dos disparos, que ingresaron de izquierda a derecha
Las heridas que presentan los dos hombres, asesinados este domingo 22, coinciden con la versión difundida oficialmente: el objetivo era capturar a los integrantes del convoy del Programa Mundial de Alimentos (PMA).
Por otra parte, los forenses identificaron munición de un fusil Kalashnikov en el cuerpo de Iacovacci. Esas armas de origen ruso son utilizadas por los rebeldes de la República Democrática del Congo pero también por las fuerzas de seguridad locales.
Italia pide explicaciones a la ONU
El ministro de Asuntos Exteriores, Luigi Di Maio, compareció en la Cámara de Diputados para explicar lo ocurrido con la delegación italiana. Exigió “respuestas claras y exhaustivas” de parte del PMA.
“Hemos pedido formalmente al PMA y a la ONU la apertura de una investigación para esclarecer lo que pasó, las razones que justifican el dispositivo de seguridad aplicado y a quién incumbe la responsabilidad de esas decisiones”, señaló en Montecitorio.
El jefe de la diplomacia italiana resaltó que fueron esos organismos los que decidieron realizar ese viaje sin vehículos blindados y con una escolta reducida. Recordó, además, que la Fiscalía ya envió un grupo de carabineros para investigar lo sucedido en la República Democrática del Congo.
A partir del hecho, las autoridades congoleñas dispusieron que los diplomáticos destinados al país deberán informar previamente cualquier desplazamiento fuera de la capital, Kinshasa.
