El primer ministro Giuseppe Conte marcó su preocupación por los disturbios en el Capitolio de Washington. “La violencia es incompatible” con la democracia, señaló. Se unió a otros líderes mundiales que rechazaron los disturbios.
Seguo con grande preoccupazione quanto sta accadendo a #Washington. La violenza è incompatibile con l’esercizio dei diritti politici e delle libertà democratiche. Confido nella solidità e nella forza delle Istituzioni degli Stati Uniti. #CapitolHill
— Giuseppe Conte (@GiuseppeConteIT) January 6, 2021
En su mensaje, que también publicó en inglés, aclaró que confía en “la solidez y la fuerza de las instituciones de los Estados Unidos”.
En el mismo sentido se expresó el ministro de Asuntos Exteriores, Luigi Di Maio. El jefe de la diplomacia italiana calificó los incidentes en Estados Unidos como “gravísimos” y “un ataque a la libertad del pueblo estadounidense”. Y aclaró que mantiene la “esperanza de que se produzca una transferencia de poder pacífica y ordenada”.
Quanto sta accadendo a Washington in queste ore è gravissimo. Un vero e proprio sfregio alla democrazia, un attacco alle libertà del popolo statunitense. Condanniamo con forza ogni forma di violenza, nell’auspicio che ci sia quanto prima un passaggio di poteri ordinato e pacifico
— Luigi Di Maio (@luigidimaio) January 6, 2021
Conte ya había reconocido como presidente electo al demócrata Joe Biden el pasado 7 de noviembre, cuando el ex vicepresidente alcanzó la mayoría en el Colegio Electoral.
Los incidentes en Estados Unidos
Un grupo de simpatizantes del presidente Donald Trump logró ingresar por la fuerza al Capitolio e incluso ocupar brevemente el recinto de la Cámara de Representantes. También forzaron oficinas de distintos legisladores, como la que utiliza la demócrata Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara Baja.
Los manifestantes habían sido convocados por el propio Trump para protestar en las puertas del Congreso por el “robo” de las elecciones que viene denunciando. Ni las legislaturas estatales ni los tribunales acreditaron las acusaciones del presidente.
Como consecuencia del vandalismo, los legisladores y el vicepresidente Mike Pence debieron ser evacuados y se pospuso algunas horas la sesión que certificaba la victoria electoral de Biden.