El anarquista Alfredo Cospito, en huelga de hambre hace más de tres meses, empeoró su condición. Lo trasladaron desde un centro médico hasta el hospital, para tratarlo con más herramientas.
Así lo explicaron fuentes judiciales, ya que su situación es “muy compleja y delicada”. “Ha llegado el momento de que se quede en un lugar donde haya más herramientas para tratarlo”, explicaron.
Su médico, Andrea Crosignani, calificó la situación como “grave”. Alfredo Cospito “pesa 71 kilos, pero está decidido a seguir adelante con la protesta. La situación desde el punto de vista físico es de un debilitamiento importante pero está presente, lúcido y decidido”, explicó.
En ese marco, resaltó que existen riesgos, ya que “cuando se trata de esta situación se necesita muy, muy poco para que se precipite, y en estos casos puede suceder sin señales de advertencia particulares”.
Por su parte, el abogado defensor, Flavio Rossi Albertini, expresó una “vehemente protesta” porque no fue informado del traslado. Según comentó, se enteró “por los propios periodistas y no, como sería normal en un país civilizado, por la dirección del instituto”.