
Este sábado 16, al menos 50.000 manifestantes señalaron su apoyo a los sindicatos y a la democracia, luego del ataque a la sede de la CGIL de la semana pasada, bajo el lema “no al fascismo”.
La marcha fue convocada en rechazo a la presencia de grupos neofascistas en las manifestaciones contra el Green Pass de la semana pasada. En ese marco, un grupo irrumpió en la sede de la CGIL y causó destrozos en el interior.
Según la policía hubo 50.000 personas, pero los convocantes hablan de más de 100.000
“Hoy gracias a la unidad de los sindicatos, el país puede caminar unido para defender la Constitución y la democracia”, señaló en la manifestación el secretario general de la CGIL, Maurizio Landini.
#MaurizioLandini: “Voglio mettervi a conoscenza di una cosa bellissima. Poco dopo l’assalto, abbiamo registrato una reazione senza precedenti di tutti i sindacati europei e mondiali. Hanno pensato se attaccano la casa del lavoro in Italia attaccano tutti noi”#Maipiufascismi pic.twitter.com/Xq3smlVuHN
— CGIL Nazionale (@cgilnazionale) October 16, 2021
“Lo primero que pedimos al Gobierno, con el apoyo de todo el Parlamento, es que las fuerzas que invocan el fascismo y utilizan actos violentos deben ser disueltas”, reclamó.
“De la solidaridad hay que pasar a la acción concreta”, pidió a los políticos
Junto a Landini estuvieron también los líderes de otros dos sindicatos: los secretarios generales de la UIL, Pierpaolo Bombardieri, y de la CISL, Luigi Sbarra. También estuvieron en la plaza ministros y los líderes de los partidos de centro izquierda. Entre ellos destacaron los ex primeros ministros Enrico Letta, del Partido Democrático, y Giuseppe Conte, del Movimiento 5 Estrellas.