La economía italiana se recupera tras el cimbronazo de la pandemia y registró un crecimiento del 2,7% en el segundo trimestre. La comparación interanual muestra un alza del 17,3%.
Se trata de una cifra por encima de las expectativas de los analistas, que esperaban un número por debajo de este. Sin embargo, la proyección marcaría un crecimiento para 2021 de un 4,8%, ligeramente inferior al 5% previsto por el Gobierno, la Unión Europea y el Banco de Italia.
Por su parte, la tasa de desocupación vuelve a mostrar datos positivos, regresando a niveles por debajo del 10%. En junio el ISTAT relevó un 9,7% para este índice, en comparación al 10,2% del mes anterior.
Según el organismo, la tasa de ocupación creció un 1%
“Tras una ligera recuperación en el primer trimestre de 2021, la economía italiana registró un crecimiento muy sostenido en el segundo trimestre del año”, indicó el informe del ISTAT.
El resultado muestra “una fuerte recuperación del sector de servicios, el más castigado por la crisis”. Asimismo, también crecen la industria y, de forma estacional, la agricultura.
Luz amarilla: la inflación
Aunque la economía italiana se recupera, una pequeña alerta aparece en el tablero: el alza de precios al consumidor, que llegó al 1,8% interanual.
Aunque la subida mensual fue del 0,3% y está fundamentada en el aumento de los precios de la energía, el ISTAT advierte que los bienes de consumo de las familias (alimentos, productos para el hogar y el cuidado personal, etc.) revirtieron su tendencia a la baja y crecieron el mes pasado.