La coalición de centroderecha aparece dividida tras la renuncia del premier Giuseppe Conte entre quienes, como Hermanos de Italia (FdI), no ven otra alternativa al voto y quienes, como Forza Italia (FI), no excluyen un Gobierno de unidad nacional.
El líder de la Lega, Matteo Salvini, se ha reunido con el Consejo Federal del partido para discutir los próximos movimientos del espacio antes del encuentro con el presidente de la República, Sergio Mattarella.
La posición de FI difiere de la de la Lega y la FdI que ahora solo apuntan a la votación, no prevén ni un Contestador ni alternativas.
Allegados a Silvio Berlusconi creen que FI podría apoyar y unirse a otro gobierno, incluso encabezado por el Partido Demócrata.
“Iremos con una delegación unitaria de la centroderecha al Quirinale para reiterar nuestro ‘no’ al Conde Ter (tercer Gobierno de Conte”, señaló el senador de Cambiamo! Paolo Romani al final de una cumbre realizada por Zoom.