Las autoridades secuestraron en Padua 9,5 toneladas de carne de cerdo procedentes de China, en medio de los esfuerzos del Gobierno y de la Unión Europea por evitar que el peligroso coronavirus que afecta al país asiático llegue a Europa.
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La Guardia de Finanzas y el Servicio de Higiene de los Alimentos y la Nutrición del Véneto realizaron el operativo por “graves y reiteradas irregularidades”, ya que en su comercialización no se cumplieron las normas aduaneras y sanitarias.
#Padova maxi #sequestro di 9,5 tonnellate di #carni suine illegalmente importate dalla Cina. pic.twitter.com/zZ39hR7Arb
— Guardia di Finanza (@GDF) January 22, 2020
La carne llegó procedente del puerto de Rotterdam y es “potencialmente peligrosa” para la difusión de la enfermedad
Este hecho despertó las críticas de la asociación de productores rurales Coldiretti. La entidad cuestionó el sistema de controles de la UE y calificó la frontera como “un colador”. Pero además, cuestionaron que a nivel nacional “la burocracia no comprende la urgencia de etiquetar los alimentos”.
Coldiretti destacó que Italia importa cada año mil millones de kilos de carne de cerdo, tanto fresca como congelada
El presidente de la entidad, Ettore Prandini, exigió que “se debe implementar inmediatamente la obligación de etiquetado en origen de la carne de cerdo”. Eso permitiría “garantizar la transparencia y trazabilidad ante las alarmas sanitarias”.
