La Fiscalía de Catanzaro ha abierto una investigación sobre el yate de 40 metros, con bandera de las Islas Caimán, que se hundió en el golfo de Squillace el pasado 20 de agosto.
El superyate de 50 millones de euros había salido de Gallipoli rumbo a Milazzo.
Investigan quién es el dueño de la embarcación de lujo
Cuatro pasajeros y un miembro de la tripulación fueron rescatados de inmediato en la lancha patrullera rumana y posteriormente transferidos a la lancha patrullera y llevados al puerto de Catanzaro Marina.
El agua invadió el casco, por lo que fue necesario abandonar la unidad que se hundió en muy poco tiempo.