Francisco se reunió con Antonio de Volokolamsk, encargado de las relaciones exteriores de la Iglesia Ortodoxa Rusa. El papa podría reunirse con el Patriarca de Moscú, Kiril, en septiembre.
El pontífice recibió afectuosamente al alto prelado, a quien luego de salud le besó el crucifijo. Volokolamsk es un religioso de gran confianza del líder ortodoxo, ya que fue su secretario privado por más de doce años.
El día anterior, el enviado de Kiril se había reunido con el secretario para las Relaciones con los Estados, Richard Gallagher. Analistas vaticanos suponen que esa reunión fue fructífera, por lo que se avanzó con el encuentro con Francisco. Y se supone que podría darse el encuentro entre ambos líderes.
Las relaciones entre el Vaticano y Moscú fueron impulsadas por Francisco. En 2016, en La Habana, se encontró con el Patriarca ruso Kiril, un hecho sin precedentes en más de 1.000 años.
En junio se esperaba otro encuentro, en Jerusalén, pero la guerra en Ucrania frenó ese nuevo acercamiento. Es que la cercanía del patriarca al presidente ruso, Vladímir Putin, y la postura pacifista de Francisco, condicionaban la reunión. Según explicó el propio Papa, ambos pensaron que podía ser “un mensaje ambiguo”.
La Iglesia ortodoxa rusa señaló en un comunicado que “durante la conversación que se realizó en italiano, el papa Francisco y el metropolita Antonio discutieron numerosos temas al orden del día, de las relaciones ortodoxo-católicas, y también de los procesos políticos en acto en el mundo”.
La especulación ahora es que pudiera haber una nueva reunión. La oportunidad llegará el 14 y 15 de septiembre, cuando ambos participarán de una cumbre interreligiosa en Kazajistán. “Espero poder saludarlo y conversar un poco con él como pastor”, señaló Francisco sobre ese hipotético encuentro.
