Hacía tres años que los investigadores excababan en las termas de San Casciano, cerca de Siena, y han dado con un tesoro arqueológico de 3.000 monedas y figuras votivas.
Se trata de un conjunto “único en el Mediterráneo”, según explican los especializastas. Ya habían logrado reconstruir las termas, fundadas por los etruscos y luego de gran importancia para los romanos.
Allí Roma había creado un conjunto monumental dedicado al descanso, pero también al culto a los dioses. Este tesoro arqueológico tiene que ver, justamente, con ofrendas a las divinidades.
En las aguas han encontrado muchísimos objetos, como reproducciones de partes del cuerpo humano, como una pierna, un pene, una oreja y un útero. Algunos incluso tienen inscripciones, por lo que puede saberse que se ofrendaban para pedir o agradecer una curación o la fertilidad.
Por ejemplo, la oreja era de un tal Aulus Nonnius, que agradecía la sanación de un mal que lo aquejaba en esa parte del cuerpo. Estas reproducciones estaban hechas en bronce.
Pero la joya del tesoro arqueológico son las 3.000 monedas en perfecto estado que se encontraron. Lo interesante es que, como se dedicaron a ser ofrendas, nunca entraron en circulación, por lo que no sufrieron ese desgaste.
El ministro de Cultura en funciones, Darío Franceschini, calificó el hallazgo como “verdaderamente excepcional” y anticipó que se construirá un museo para alojar y exhibir parte de estos hallazgos.
El arqueólogo Jacopo Tabolli señaló que se trata de un hallazgo “sin igual en Italia y en el Mediterráneo antiguo”. En declaraciones a ANSA, subrayó que “las dimensiones de la zona del santuario es mucho más grande de lo que podíamos imaginar, con varios edificios sagrados, altares, piscinas”.