El pontífice, de 85 años, lleva meses con un malestar en su rodilla, por una rotura de ligamentos. Esta semana acudió a una audiencia en una silla de ruedas.
Los dolores en su pierna derecha, que venían limitando sus movimientos, esta vez lo han llevado a requerir esta asistencia. Según comentó en varias ocasiones, los médicos le recomiendan caminar lo menos posible para bajar la inflamación.
El miércoles, en la Audiencia general realizada en la Plaza de San Pedro, el líder de la Iglesia Católica caminó unos pocos pasos entre el papamóvil y el sillón desde donde presidió las actividades.
En Pascua, Francisco ya no había podido participar en todas las ceremonias
Francisco llegó en silla de ruedas, empujado por un colaborador a la XXII Asamblea Plenaria de la Unión Internacional de Superioras Generales (UISG), realizada en el Aula Paulo VI del Vaticano este jueves.
#UISGPLENARY2022
AUDIENCIAFueron muchos los temas afrontados hoy durante la audiencia del Papa Francisco en el aula Pablo VI de la Ciudad del Vaticano: guerra en Ucrania, vida religiosa femenina, discernimiento dentro de las comunidades religiosas y colonialismo#UISGPlenary pic.twitter.com/8exkm3FGrz
— UISG International Union of Superiors General (@uisg_superiors) May 5, 2022
Esta situación llevó a que el papa se infiltre. Incluso no se descarta una operación, aunque parece ser la última opción para sus médicos. La silla de ruedas y caminar poco son parte de las sugerencias de los especialistas.
Los problemas de salud de Francisco podrían limitar aún más su actividad. De hecho, están en dudas sus próximos viajes. A lo largo de los próximos meses tiene programadas visitas a El Líbano, República Democrática del Congo, Sudán del Sur y Canadá.
Aunque él enfrió la posibilidad en una entrevista reciente, tampoco descartó un viaje a Moscú para intentar mediar en el conflicto entre Rusia y Ucrania. Sin embargo, resta saber qué podrá hacer y qué ante sus problemas en la rodilla derecha.
