El golpe del coronavirus en Italia fue demoledor para el sistema sanitario, pero también para la economía, una de las más inestables de la Unión Europea. Es por eso que distintos actores ya proyectan cómo trabajarán el próximo verano, sabiendo que será necesario convivir con el coronavirus.
Las playas de Costa Casareo, Salento, nucleados en el CNA Apulia ya presentaron proyectos de cómo piensan aislar a los futuros veraneantes en las playas de la zona.
Una de las más extremas es el uso de paneles de acrílico que formarán cubículos para dos personas, de 4,5 metros de ancho, 4,5 mts de largo y 2,0 metros de alto. Allí se ubicarán dos reposeras y una sombrilla grande.
Ovviamente le spiagge della Liguria in un progetto così non sono contemplate. Sono la prima ad amare le spiagge e il mare ma così è pura FOLLIA #Fase2 pic.twitter.com/DUqCoJZ6rb
— robylarry (@Roby_Laratro) April 14, 2020
https://platform.twitter.com/widgets.js
Sin embargo, hay otras propuestas menos agresivas, al menos para la vista… Una de ellas se estudia en el balneario Bacino Grande, donde con cuerdas se traza un perímetro 10 metros cuadrados donde se ubicarán las sillas y sombrillas.
“Queremos poner sobre la mesa propuestas válidas para apoyar a aquellos que tienen que decidir las nuevas reglas destinadas a regular la hospitalidad de los turistas en las playas de Apulia”, agregan Toti Di Mattina y Giuseppe Mancarella, jefe de los centros turísticos costeros de Apulia y Salento.
Para los primeros días de mayo está prevista la reunión entre éstos y la directora del área de Turismo, Cultura y Gestión de Bienes Culturales de Apulia, Loredana Capone.