Un grupo de 34 italianos a bordo del crucero Diamond Princess están a salvo, y 30 de ellos terminan su odisea. Todos han dado negativo en los test y la mayoría volverán mañana al país en un vuelo de la Fuerza Aérea italiana, junto a otros 27 europeos.
Aunque serán sometidos a un segundo -y definitivo- test, todo indica que serán enviados a casa mañana. En tanto, un connacional sí resultó positivo por el Covid-19, por lo que está siendo sometido a los cuidados y tratamientos disponibles contra la enfermedad.
De los 3700 pasajeros, al menos 620 tienen la enfermedad y dos fallecieron.
El barco está en cuarentena desde el 3 de febrero en el puerto japonés de Yokohama. Los muertos eran una pareja de ancianos de Japón, de unos 80 años.
En tanto, los italianos que permanecerán en el barco son cuatro tripulantes y el capitán, Gennaro Arma. Según la armadora Princess Cruises, él está “al mando de la nave, coordinando tareas con los funcionarios de la sanidad pública para garantizar la seguridad, salud y bienestar de los pasajeros y el equipaje”.
Además, indica que está “bien de salud, al mando de su equipo en esta situación extraordinaria”. Sin embargo, aclaran que “no ve la hora de volver a casa con su mujer y su familia”. Y piden a los medios “respetar la privacidad” de sus parientes.
La epidemia ya registra al menos 75.775 casos positivos, que llevaron a 2.130 muertes. De ellas, 2.029 se produjeron en la provincia china de Hubei, epicentro de la enfermedad, y sólo 7 fallecieron fuera de China. En tanto, 16.882 pacientes se recuperaron y están oficialmente curados.