El trigésimo segundo informe Eurispes Italia 2020, presentado el 29 de enero en el aula magna de la universidad Sapienza de Roma, muestra un cuadro alarmante en relación a las ideas del pueblo italiano sobre el Holocausto, los judíos y la evaluación de de Benito Mussolini.
Según el 23,9% de los italianos, los judíos controlan el poder económico y financiero, y según el 22,2% también controlan los medios de información
El 26,4% de los italianos cree que los hebreos controlan la política de los Estados Unidos de América.
En comparación con el informe del 2004, el número de italianos que cree que la Shoah no existió ha crecido desde el 2,7% hasta el 15,6%.

El 61,7% de los italianos cree que recientes fenómenos de antisemitismo son casos aislados y no índice de un real problema de antisemitismo en el país.
El 60,6% piensa que tales actos son la consecuencia de la difusión de un lenguaje fundado sobre odio y racismo.
Ante la pregunta sobre cuál afirmación exprese de la manera mejor el alma de los italianos, el 19,8% ha escogido: “Muchos piensan que Mussolini fue un gran líder que tan solo ha cometido algún error”.

En tanto, el 14,3% ha elegido la afirmación “los italianos no son fascistas, pero aman a las personalidades fuertes”. El 14,1% eligió la afirmación “somos un pueblo prevalentemente de derecha” y el 12,7%, “orden y disciplina son valores muy apreciados por los italianos”. El 26,2 % de los entrevistados no comparte ninguna de las afirmaciones anteriores.
Ruth Durghello, presidenta de la comunidad hebraica de Roma, estuvo presente en el aula magna de la Sapienza para la presentación del informe: “Los resultados del trigésimo segundo informe Eurispes que registra un aumento de los italianos que niegan la existencia de la Shoah, por lo clamorosos que sean, desafortunadamente no nos sorprenden“.
“El negacionismo no es tan solo una ofensa hacia los judíos, sino una vulgar manipulación de la historia que debe preocupar a la entera sociedad”, agregó

Durghello ha evaluado que “los datos Eurispes deben entonces solicitar una reflexión general sobre cómo transmitir a las próximas generaciones la historia de la Shoah, aún en la perspectiva de que faltarán todos los testigos directos”.