Un embarcación con aproximadamente 50 migrantes a bordo naufragó en la noche del 6 de octubre, a pocas millas de Lampedusa, lo que provocó la muerte de 13 mujeres que iban en la embarcación, entre ellas una niña de 12 años. Además, ocho niños, una madre y su bebé de solo 8 meses se encuentran desaparecidos.
Ese es el balance del operativo de rescate de la Guardia Costera y la Guardia de Finanzas, que lograron rescatar a 22 personas de esa embarcación, una de las cuales se encuentra en coma, en grave estado.
La mayor parte de los migrantes proceden de Túnez o de países subsaharianos
En un mar agitado, con viento y lluvia, las tareas comenzaron cuando las autoridades fueron alertadas de la presencia de la nave.
Al acercarse las autoridades, por la desesperación todos los migrantes se acercaron a una banda, haciendo que perdiera la estabilidad y cayeran al agua.
“No se pueden seguir muriendo así a pocas millas de la isla. Es indispensable un dispositivo de auxilio”, señala el alcalde de Lampedusa, Totò Martello.
Por su parte, la ministra de Infraestructura y Transporte, Paola De Micheli, confirmó que el operativo de rescate “está en curso” para hallar a los desparecidos, aunque se lamenta porque presagia que “el balance de muertos será más alto”. Señaló además que “la pérdida de vidas humanas en el mar es una tragedia humana y una realidad inaceptable”, y expresó su respaldo a quienes están llevando adelante las tareas de rescate.