Los alumnos de la escuela de Monte Cervino en Foligno, denunciaron un hecho aberrante: un profesor apartó a un alumno de piel negra, al que le indicó que se coloque mirando a la ventana “por ser demasiado feo para ser mirado a la cara“.
Esto se conoció después de que uno de los padres de los alumnos publicara el relato en Facebook, posteo que al poco tiempo borró. Sin embargo, las autoridades ya investigan el hecho.
Mauro Bocci, el profesor que estaba realizando una suplencia, trató de explicar lo inexplicable: “Fue un experimento social”.
Según sus palabras, en la clase se abordó el holocausto y al parecer le resultó oportuno realizar un ejemplo en plena sala.
“Les pregunté a los niños si podemos hacer algo similar, y me respondieron ‘probemos'”, indicó el docente, tratando de escudarse en la aprobación por parte de los niños.
“Le mostré a la clase lo que nunca debes hacer: aislar a alguien porque no tiene la piel de tu mismo color”
De hecho, se conoció que el mismo hecho fue repetido en otra clase con la hermana menor del niño discriminado.
Bocci se encuentra suspendido tras trascender públicamente lo ocurrido, mientras que comenzaron las investigaciones para conocer con precisión qué sucedió.
Ho chiesto agli uffici di intervenire immediatamente. Le strutture territoriali del Ministero stanno predisponendo provvedimenti urgenti a tutela della serenità degli alunni. La scuola è luogo di inclusione ed è di tutti. #Foligno
— Marco Bussetti (@bussetti_marco) 21 de febrero de 2019
“Pedí a las oficinas que intervengan de inmediato. Las estructuras del Ministerio están preparando medidas urgentes para proteger la serenidad de los estudiantes”, escribió en un tweet el ministro de Educación Marco Bussetti.
“La escuela es un lugar de inclusión y pertenece a todos”, agregó
En tanto, la dirigente docente regional Antonella Iunti remarcó: “Nos han informado de este caso y estamos realizando todas las investigaciones necesarias”.
Por su parte, el alcalde de Foligno, Nando Mismetti, añadió que “se espera una declaración oficial de la escuela, porque en estos momentos la información que tenemos se basa en las historias de los niños. Si se verificara, sería de una gravedad absoluta”.
