El caso del Sea Watch que desató una disputa diplomática con Holanda será debatido ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH).
Italia está lista para poner a disposición “corredores humanitarios” para los migrantes, pero solo para permitir su traslado a Holanda, detalló el Gobierno.
“La conducta de la nave fue imprudente. ¿Querían crear un caso de medios?”, se pregunta un comunicado del Palacio Chigi.
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“Italia considera que la jurisdicción, en este caso, pertenece a los Países Bajos, como país de bandera del barco que realizó el rescate en aguas internacionales, por lo que depositará un memorando ante la Corte, con el cual reclamará la jurisdicción holandesa. En otras palabras, declarará que no es Italia la que tiene que responder a este caso, a la luz del derecho nacional e internacional”, explicaron desde el Gobierno.
“Estamos listos para un incidente diplomático con los Países Bajos”, adviertie el vicepremier Luigi Di Maio
Además de la disputa abierta con Holanda, en el plano local el barco que está cerca de la costa de Siracusa generó enfrentamientos entre el Gobierno y la oposición.
“Queste persone non sono merce e il mio paese non è una dogana”.@giorgialinardi dopo la visita di oggi a bordo della #SeaWatch, bloccata a un miglio da Siracusa.
Questi naufraghi sono ostaggi a 5 minuti da terra. pic.twitter.com/9ExZNR36m4
— Sea-Watch Italy (@SeaWatchItaly) 27 de enero de 2019
Referentes del Partido Democrático (PD) visitaron la embarcación, lo que despertó la furia del Movimiento 5 Estrellas y de la Lega.
“Los campos en Libia son un infierno, nos dijeron los migrantes del Sea Wathc”, escribió Matteo Orfini, presidente del PD.
I campi in Libia sono un inferno che non finisce mai, ci hanno detto i migranti sulla #SeaWatch.
Io e @maumartina siamo appena rientrati in porto.
Ora stiamo facendo l’elezione di domicilio perché a quanto pare siamo indagati per essere saliti sulla nave. pic.twitter.com/LNFfZI3GpI— orfini (@orfini) 28 de enero de 2019
“Aparentemente estamos siendo investigados por subir al barco”, agregó.
La delegación había abordado el Sea Watch después de una reunión en la prefectura de Siracusa, que había decidido detener la navegación, a menos de media milla, del barco de la ONG con 47 migrantes a bordo.
“En el Sea Watch, quiero reiterarlo, no hay mujeres ni niños, estas personas no deben ser puestas en manos de contrabandistas que son los verdaderos delincuentes”, se defendió el vicepremier, Matteo Salvini.
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