El presidente de la república, Sergio Mattarella, encabezó un acto en la antesala del Día Internacional de Conmemoración en Memoria de las Víctimas del Holocausto, que se conmemora los 27 de enero. “Este día es una invitación, constante y convincente, al compromiso y la vigilancia”, lanzó desde el palacio del Quirinal.
“Nosotros los italianos, que hemos experimentado la vergüenza indeleble de las leyes racistas fascistas y la consiguiente persecución de los judíos, tenemos un deber moral: hacia la historia y hacia toda la humanidad, el deber de recordar, sobre todo”, remarcó el jefe del Estado.
“En Italia y en el mundo, el antisemitismo y el racismo están en aumento, inspirados por las viejas doctrinas y las ideologías nuevas y perversas”, denunció.
“El holocausto es un mal listo para despertar, golpear y destruir tan pronto como regresen las condiciones”, advierte Mattarella
“El nacionalismo exasperado es el enemigo de la convivencia”, dijo el presidente de la república y agregó que “las persecuciones nazis eran parte de un proyecto de la sociedad basado en el predominio de los llamados pueblos puros”.
En el acto en el que también participaron el premier Giuseppe Conte y los vice, Matteo Salvini y Luigi Di Maio, junto a sobrevivientes de la Shoah, Mattarella aseguró que “Auschwitz fue el más grande y letal de los campos de exterminio”.
