El ministro del interior, Matteo Salvini, presenció el trabajo de las máquinas que demolieron las mansiones del clan mafioso Casamonica.
“Seguiremos a los delincuentes calle por calle, barrio por barrio, negocio por negocio”, prometió
“En el decreto Sicurezza se potencia a las agencias que realizan allanamientos”, remarcó Salvini. “Me gusta demoler, pero también reconstruir”, remarcó.
Esta mañana, Guerino Casamonica, que vivía en la mansión en via Roccabernarda, había dicho: “¿Salvini? Bueno, venga. Si quiere, también le ofrezco café”. Agregó que la propiedad en cuestión es de su hermana que murió y que su padre también había vivido allí.
“No controlamos ningún territorio”, aseguró Guerino. “Si molesto a los vecinos, solo fue por algunas fiestas”, dijo tras asegurar que la propiedad no era ilegal.