La Comisión Europea ha solicitado detalles adicionales sobre el acuerdo de migración entre Italia y Albania, que prevé la creación de instalaciones temporales de recepción en territorio albanés para los migrantes rescatados en el Mediterráneo por naves italianas.
Durante una conferencia con la prensa, Anitta Hipper, portavoz de la Comisión Europea, declaró: "Estamos en contacto con las autoridades italianas y hemos pedido recibir detalles sobre el acuerdo de migración con Albania. Antes de comentar más al respecto, debemos comprender exactamente lo que se pretende hacer".
La comparación del acuerdo entre Italia y Albania con el acuerdo Gran Bretaña-Ruanda para la externalización de migrantes, planteada por miembros de la oposición, también se abordó en la conferencia de prensa.
En respuesta a esto, Hipper afirmó que "necesitamos información de Italia antes de entrar en los detalles, pero según la información inicial que hemos visto, estos acuerdos no son lo mismo".
El vicepresidente del Consejo de Ministros de Italia, Matteo Salvini, elogió la colaboración con Albania al afirmar: "Italia no es el campo de refugiados de Europa".
Por otro lado, Elly Schlein, secretaria del Partido Democrático (PD), expresó su preocupación. Opinó que el acuerdo con Albania parece estar en violación abierta de las normas del derecho internacional y europeo.
Schlein enfatizó la importancia de compartir responsabilidades en la recepción de migrantes, de acuerdo con los tratados europeos. Además, exhortó al Gobierno a presentar información detallada sobre el acuerdo en el Parlamento.
El protocolo establece que Italia utilizará el puerto de Shengjin, cerca de Bari, y el área de Gjader para construir dos instalaciones. Una para las operaciones de desembarco e identificación, y otra para la recepción temporal de inmigrantes rescatados en el mar, especialmente menores, mujeres embarazadas y otros individuos vulnerables.
Una vez que estén completamente operativas, se espera un flujo anual de entre 36.000 y 39.000 personas.
