
Imelda Starnini es una mujer de 90 años que quiere ser maestra. Nació en 1933 y está haciendo los exámenes de ingreso a la carrera.
La conmovedora historia recorre Italia. Città di Castello, una ciudad a 50 kilómetros de Perugia, en Umbría, trae una sorpresa entre los estudiantes que quieren ingresar a la universidad.
Se trata del examen de Maturità, que es el que permite que los jóvenes que terminan la educación secundaria puedan acceder a la universidad. Pero lo debe aprobar cualquier persona que quiera entrar a la educación superior.
El caso es claro: esta mujer de 90 años quiere ser maestra porque siempre lo deseó. Soñó desde joven con lograrlo, pero luego de la Segunda Guerra Mundial la situación económica de su familia no se lo permitió. Aunque nada indica que vaya a ejercer, se presentó al examen en el Istituto San Francesco di Sales para estudiar. Una escuela fundada en 1816, una de las más antiguas de Europa.
“Nada se consigue en la vida sin sacrificio y a esta edad he decidido volver a meterme en el juego y afrontar este examen”, señaló la examinada. Para ella es “un objetivo que siempre he perseguido pero que por diversos motivos, familiares y laborales” no pudo concretar. “Ahora estoy aquí y gracias a la ayuda de mi familia, estoy iniciando el proceso de prueba, que espero me lleve a obtener mi diploma“, agregó.
“Abrazo a todos estos hermosos jóvenes que hoy aquí conmigo y en toda Italia están listos para superar los obstáculos de los exámenes”, dijo a sus compañeros. “El estudio, el conocimiento y el deseo de saber no tienen edad y yo soy prueba de ello”, se enorgulleció.