Tik Tok, la popular aplicación de propiedad de la sociedad china Bytedance no deja de despertar sospechas. De momento, los servicios secretos italianos están conduciendo investigaciones.
El ministro de la función publica, que se ocupa de lo trabajadores del Estado, está a la espera de los resultados. Al parecer ya el Gobierno de Giuseppe Conte había abierto un dosier al respecto.
La desconfianza italiana hacia Tik Tok llega tras declaraciones y medidas de distintos organismos incluso internacionales
Los últimos dos presidentes de los Estados Unidos se pronunciaron en contra de la aplicación, Taiwán la ha borrado de todos los dispositivos gubernamentales y en India está prohibida para todos.
Además, hace días la Comisión Europea pidió a sus empleados desinstalarla antes de la mitad de marzo.
En fin, se teme que la aplicación, tan popular sobre todo entre los jóvenes, pueda actuar como un caballo de Troya.
Se supone que quien controla Tik Tok pueda conocer los movimientos de los usuarios y de esta forma llegar a afectar los resultados electorales.
El pasado noviembre Elaine Fox, responsable europea de la privacidad de Tik Tok admitió que los empleados chinos pueden acceder a los dados de los europeos que usan la aplicación, pero que pronto la sociedad abriría nuevas filiales en Irlanda. No precisamente algo tranquilizante.
