
La joven de 26 años había sido víctima de Davide Fontana, su vecino y presuntamente ex pareja, que confesó macabros detalles de la muerte de la actriz porno.
Carol Maltesi, también conocida como Charlotte Angie, habría sido asesinada por este hombre, un empleado bancario de 43 años, en enero. Según él, habían sido pareja pero seguían haciendo fotos y videos pornográficos que vendían en una plataforma online.
Fontana aseguró que, en el vídeo que grababan “el 10 ú 11 de enero” ella era atada de pies y manos. Esto habría tenido lugar en la localidad de Borno, en Lombardía. En esa situación, comenzó a golpearla con un martillo y terminó cortándole el cuello. Lo hizo, según dijo a la policía, por razones que él mismo desconoce.
“Cuento todo esto porque quería quitarme este lastre y decir la verdad”, dijo, una vez que se descubrió el cadáver, diseccionado y casi irreconocible, en unas bolsas en una zona rural de Brescia.
El intento de encubrimiento del femicidio es macabro. El hombre compró una motosierra y un hacha para cortar el cuerpo y borrar los característicos tatuajes de Maltesi. Luego, la guardó en un congelador.
Y finalmente, la descartó “durante unas vacaciones”. Allí fue donde un caminante encontró las bolsas “de donde salía una mano”. La policía difundió los tatuajes que aún podían verse y rápidamente dieron con la identidad de la víctima.
Para no levantar las primeras sospechas, Fontana fingió durante dos meses ser la actriz porno. Utilizando el teléfono móvil de la víctima, siguió respondiendo mensajes y pagando el alquiler de su vivienda.
La víctima, que tenía un niño de seis años, habría tenido una relación abierta algunos meses en 2020 con este hombre. Él mismo admitió a la policía que cuando ella salía con otros, era “demasiado celoso”.