El jugador brasileño tiene una sentencia en su contra por haber violado a una mujer en 2013, cuando era jugador del Milan. La Fiscalía pidió la extradición de Robinho porque la condena está firme.
El Ministerio de Justicia emitió una orden de captura internacional, por lo que Interpol podría detenerlo en cualquier parte del mundo.
Sin embargo, los caminos para que el jugador cumpla su sentencia parecen limitados. Es que Robson de Souza, nombre real de Robinho, vive en su país, Brasil, que no extradita a sus ciudadanos.
Además, Italia y Brasil no tienen un convenio de entrega de prisioneros, por lo que la extradición de Robinho tiene una complicación adicional.
Sin embargo, con la orden ya emitida, el jugador sería detenido y enviado a Italia si es hallado en otro país que sí tenga ese acuerdo.
La sentencia
Un tribunal de Milán condenó en 2017 al jugador y a otros cinco brasileños de violar en grupo a una mujer albanesa que por entonces tenía 22 años. Lo hicieron después de embriagarla en una discoteca.
De acuerdo a la Justicia, la llevaron a beber “hasta el punto de dejarla inconsciente e incapaz de resistirse” y luego cometieron la violación “varias veces seguidas”.
Aunque Robinho niega las acusaciones, el juzgado de Milán sostuvo que “humilló brutalmente” a la víctima y desvió voluntariamente las investigaciones.
La condena fue confirmada por un tribunal de apelación en 2020. La Corte Suprema finalmente la validó en enero, por lo que se considera firme.
En ese sentido, fue clave una escucha telefónica donde opinaba sobre la denuncia. “Me da risa porque no me interesa, la mujer estaba borracha, ni sabe lo que pasó”, lanzó.
“Para nosotros no cambia nada si cumple la condena en Italia o en Brasil. El todo es que la cumpla, sobretodo por el crimen cometido, para tutelar a las mujeres”, declaró a AFP el abogado de la víctima, Jacopo Gnocchi.
