“Esta mañana, todos los servicios ambulatorios de la Dirección de Salud e Higiene del Estado de la Ciudad del Vaticano fueron suspendidos temporalmente para desinfectar los ambientes tras una positividad a COVID-19 encontrada ayer en un paciente”, informó el portavoz del Vaticano, Matteo Bruni.
La Santa Sede se suma de esta manera a la epidemia de casos de coronavirus que golpea a Italia, principalmente a las regiones del norte.
“Sin embargo, la unidad de primeros auxilios permanece en funcionamiento. El Departamento de Salud e Higiene está tomando medidas para informar a las autoridades italianas competentes y mientras tanto se han iniciado los protocolos de salud planificados”, agregaron desde la Santa Sede.
Días atrás la salud del propio papa Francisco había preocupado al mundo entero por un resfriado. Incluso, durante el Ángelus se lo vio toser. Sin embargo, estudios posteriores, descartaron que el sumo pontífice hubiera contraído el coronavirus.
