Según cuanto referido por los periódicos Il Corriere y La Repubblica’el 5 me mayo, habría un viraje en el caso del asesinato del joven ayudante italiano Giulio Regeni, que fue raptado en Egipto el 25 de enero de 2016 y fue encontrado muerto 10 días después sin aparente razón.
Ahora, por lo que se ha filtrado, un testimonio afirma que, en un encuentro de policías africanos que tuvo lugar en el verano de 2017 en un país de aquel continente, un funcionario egipcio habría confesado a un colega extranjero que fue él con otros funcionarios quienes detuvieron a Regeni porque creían que fuese una espía inglés. “Lo cogimos. Yo me fui y, después de haberlo cargado en el coche, tuvimos que golpearlo. Yo mismo lo golpeé varias veces en la cara”.
El testigo dio nombre y apellido de ese funcionario, ya que lo vio dar su tarjeta de visita al colega con el que habló. El funcionario egipcio sería uno de los cinco hombres ya ingresados en el registro de los indagados por la Fiscalía de Roma por secuestro de persona.
Los fiscales Giuseppe Pignatone y Sergio Colanicco han presentado a El Cairo una nueva petición de nuevas informaciones.
El premier, Giuseppe Conte, dijo haber hablado, el día 4 de mayo con el presidente egipcio, Abdelfatah Al Sisi, sobre ese caso cuando explicó sus deberes en estos días: “Ayer ha sido un día de trabajo en Palacio Chigi. Hubieron los estados generales en Florencia, hablé con Al Sisi, tuve un largo coloquio por teléfono: hay una petición a sostener, además que una puesta al día de la situación libia”.
