San Gregorio Armeno es la calle de Nápoles en donde todos los años se montan los principales puestos de Navidad, convirtiéndose en uno de los principales atractivos de la ciudad durante las fiestas.
Entre los productos a la venta están los integrantes del clásico pesebre, que en Nápoles no solo está compuesto por los pastores, el niño Jesús, María o José, sino también por personajes históricos o de la actualidad, como Diego Maradona, Silvio Berlusconi o el papa Francisco.
Y entre estos últimos, se encontró una estatuilla de Adolf Hitler. El autor de esta polémica representación es Genny Di Virgilio, uno de los artistas más reconocidos del país en esta materia.
“Debo recapacitar. No lo haría de nuevo”, se defendió el artesano. “Lo hice por un pedido puntual de un cliente. No pensé en el revuelo político e ideológico, para mí es un trabajo más”, agregó.
Lo cierto es que no es la primera vez que Genny realiza una figura poco feliz, dado que entre los ‘personajes’ más solicitados y exhibidos en su local, se encuentra Benito Mussolini.
Por supuesto que las condenas públicas no tardaron en caer sobre el maestro artesano. Una de ellas, de parte de Giuseppe Crimaldi, presidente de la Federación Nacional Italiana-Israelí, y Lydia Schapirere, presidenta de la Comunidad Hebraica de Nápoles.

“Desconcierta y ofende a la dignidad humana, la memoria histórica, además del buen gusto, la decisión del artista Gennaro Di Virgilio de exhibir entre los pastores que él crea a la estatuilla de Adolf Hitler”, denunciaron en un comunicado conjunto.
La misiva, finaliza afirmando que “el episodio es aún más preocupante porque coincide con uno de los momentos más delicados de Italia y Europa, donde los episodios de antisemitismo y ciertos movimientos de extrema derecha de clara inspiración neonazista y neofascista se están peligrosamente difundiendo“.