El ex primer ministro Silvio Berlusconi deja el Hospital San Raffaele de Milán tras 45 días. “Estoy mejor”, aseguró.
“Todavía tengo que recuperar mis fuerzas, pero es solo cuestión de tiempo“, señaló el empresario y político, de 86 años, en una entrevista con el Corriere della Sera. “Fue duro, pero siempre he tenido esperanzas”, agregó.
El líder se cuidó de mencionar el papel de sus familiares en su internación. “Marta se superó a sí misma, estuvo a mi lado con un cariño y una entrega sin igual”, elogió. En tanto, agradeció también a sus hijos, hermano y amigos, que han estado “muy cerca de mi”. “En tiempos difíciles, el amor de una familia es verdaderamente lo más importante”, reflexionó.
“Giorgia Meloni y Matteo Salvini han estado cerca de mí en las últimas semanas como verdaderos amigos”, subrayó. Sostiene qu ello demuestra que su relación “no es solo política, sino que también se compone de un vínculo personal profundo”.
“En lo que se refiere al futuro, tenemos muchas cosas que hacer y las seguiré haciendo, como siempre, al frente de Forza Italia”, indicó Il Cavaliere, que anticipó una “renovación” de su movimiento.
Aunque señaló que partido “cuenta con una clase dirigente nacional y local experta”, cerró la puerta a despedirse, ya que dijo que continuará “ejerciendo plenamente” como líder de Forza Italia.
Según su análisis, Forza Italia está llamado a ocupar el centro del espectro político. “Con el Partido Demócrata cada vez más a la izquierda y el declive del llamado Tercer Polo, que murió antes de nacer, el espacio en el centro se está ampliando y Forza Italia lo encabeza”, analizó.
