La primera ministro, Giorgia Meloni, se refirió a las polémicas sobre migración: “es mucho mejor colaborar que discutir”. El ministro del Interior desarrolló su visión.
La jefa del Ejecutivo llamó a volver a discutir el tema en la Unión Europeo. “Las soluciones identificadas hasta ahora probablemente no son las mejores y son insuficientes”, opinó.
Para la líder de Fratelli d’Italia, el país no puede ser el que reciba toda la carga de las migraciones por el Mediterráneo. Este fue uno de los temas centrales de su encuentro con el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, durante la cumbre del G20, en Bali.
El ministro del Interior, Matteo Piantedosi, amplió sus conceptos en el Senado. Dijo que la “prioridad absoluta” es “proteger la dignidad de las personas”. Pero explicó que Italia ya recibió 90.000 personas este año y está sobrepasada.
Para él, deben “gobernarse” y no “sufrirse” los flujos migratorios. “Necesitamos una nueva política europea verdaderamente basada en el principio de solidaridad”, señaló.
En ese sentido, recordó que Italia tuvo en 2022 69.000 pedidos de asilo, un 56% más que el año anterior. Y la mitad fueron rechazados, por lo que Piantedossi sostiene que “la mayoría de los inmigrantes que llegan a Italia están motivados por razones económicas y no tienen derecho a quedarse aquí”.
Asimismo, llamó a algún tipo de medida en el norte de África para contribuir al desarrollo y combtrir el tráfico de personas. Y acusó a las ONG de ser un “factor de atracción”. “Las organizaciones criminales basan su modus operandi en la presencia de ONG en la zona”, lanzó.
Por otro lado, indicó, respecto a la polémica con el Ocean Viking, que no estaba en aguas italianas, por lo que la responsabilidad era de Libia o Malta. O, como terminó sucediendo, del país de bandera del barco: Francia.