El secretario de Estado vaticano, el cardenal Pietro Parolin, afirmó este 24 de junio que la Santa Sede no ha pedido detener el proyecto de ley contra la homofobia que se debate actualmente en el Senado italiano.
Sin embargo, reconoció que la Santa Sede solo ha mostrado sus preocupaciones dentro de los canales diplomáticos habituales.
Durante las últimas horas, medios de todo el mundo titularon que el Vaticano había pedido al Gobierno de Italia que cambie su proyecto de ley contra la homofobia y transfobia, ya que consideraba que algunos pasajes de la norma violan el Concordato que regula las relaciones entre Iglesia y Estado desde 1984.
Editorialistas calificaron la medida como “sin precedentes” y acusaron a la Iglesia católica de “injerencia”.
Parolin: “De ninguna manera se ha pedido que se bloquee la ley. Estamos en contra de cualquier actitud o gesto de intolerancia u odio hacia las personas por su orientación sexual, así como por su etnia o sus creencias”.
“Nuestra preocupación concierne a los problemas interpretativos que podrían surgir si se adoptara un texto con contenidos vagos e inciertos, lo que terminaría trasladando la definición de lo que es delito y no lo es al proceso judicial. Pero sin darle al juez los parámetros necesarios para distinguirlo”, añadió en una entrevista concedida a Vatican News.
El secretario para las Relaciones con los Estados, Paul Richard Gallagher, entregó el pasado 17 de junio una carta en la Embajada italiana ante la Santa Sede para reclamar esos cambios, según reveló el 22 de junio el diario Corriere della Sera.
Por su parte, el primer ministro, Mario Draghi, recordó que Italia “es un Estado laico, no confesional”, y que su Parlamento es “libre de debatir”.
“Estoy totalmente de acuerdo con el primer ministro Draghi sobre el carácter secular del Estado y sobre la soberanía del Parlamento italiano. Por ello, se eligió el instrumento de la nota verbal, que es el medio adecuado de diálogo en las relaciones internacionales”, dijo Parolin, quien insistió: “No ha sido una interferencia”.