El nuevo decreto del Gobierno plantea fuertes restricciones a los movimientos entre regiones de cara a las fiestas de fin de año. El primer ministro, Giuseppe Conte, presentó las medidas como la forma de “evitar una tercera ola” de coronavirus.
Entre las novedades, se impone una cuarentena obligatoria para quienes retornen al país desde el extranjero. La restricción, que también estará vigente para los turistas que lleguen a Italia, “es claramente una medida disuasiva”, puntualizó el premier.
“Estamos evitando otro cierre generalizado”, señaló Conte
Entre el 21 de diciembre y el 6 de enero no podrá haber viajes de una región a la otra, independientemente del color de alerta que tengan. Tampoco si se trata de desplazamientos hacia segundas residencias. Solo se autorizarán los regresos al domicilio habitual.
El 25 y 26 de diciembre y el 1° de enero tampoco se podrá viajar entre municipios. Asimismo, se mantiene el toque de queda de 22 a 5, que se extenderá a las 7 de la mañana en el primer día de 2021.
Conte señaló que se trata de una medida “imprescindible para proteger a nuestros seres queridos”.
Una tendencia positiva
El primer ministro explicó que busca que se mantengan los buenos resultados de las restricciones que vienen imponiéndose.
“Hemos visto una caída en el acceso a las salas de emergencia y las admisiones a cuidados intensivos. En un par de semanas, todas las regiones estarán en la zona amarilla”, explicó.
Conte subrayó que “esto es significativo dado que las oficinas y fábricas en las áreas rojas permanecieron abiertas y los niños fueron a la escuela”.
Sin embargo, para justificar las nuevas restricciones, Conte analizó que si se aplicaran a las vacaciones de navidad los protocolos de las áreas amarillas el repunte sería “inevitable”.
“Aún queda un largo camino por recorrer para salir de la pandemia, debemos evitar una tercera ola en enero”, agregó.