La Policía logró detener a un hombre que había ingresado armado con un cuchillo a la catedral de Milán (Duomo di Milano). El atacante tomó como rehén a uno de los guardias, mientras que varios efectivos de la Policía lo rodeaban.
El incidente provocó el despliegue de las unidades antiterroristas por miedo a un posible atentado en el interior de la famosa catedral
El atacante exigía que los efectivos depusieran de sus armas. En un momento de la negociación, uno de los policías aprovecha la distracción del secuestrador y se abalanza sobre él. El hombre ha quedado detenido y nadie resultó herido.
Por el momento no existen pruebas concretas que sugieran que se trata de un acto terrorista, si bien han abierto una investigación al respecto.