El número de profesionales de la salud que han muerto por contagios de coronavirus asciende a 36. Desde la Federación Nacional de Cirujanos y Dentistas (Fnomceo) exigen mayor protección y pruebas rápidas de COVID-19.
“Las pruebas deben garantizarse a todos los médicos en la primera línea, incluidos los médicos generales y los operadores de hogares de ancianos y guarderías”, sostiene el presidente de Fnomceo, Filippo Anelli, en una carta publicada en el British Medical Journal.
“Es razonable suponer que estos eventos habrían sido evitables en gran medida si los trabajadores de la salud hubieran sido informados correctamente y equipados con suficiente equipo de protección personal adecuado: máscaras, guantes, batas desechables, viseras protectoras que continúan siendo escasos en medio de una epidemia a la que incluso Italia se había declarado lista hace dos meses”, señala la misiva.
