Tras la confirmación de los primeros casos de coronavirus en Italia y a pesar del pedido de calma de Giuseppe Conte, los habitantes de distintas ciudades arrasaron las góndolas de farmacias y supermercados donde se vendían mascarillas.
Si bien en días anteriores la venta había subido debido a la mala calidad de aire en diversas ciudades del país, que obligó a la prohibición de la circulación de autos en Roma o Milán, la presencia de los primeros casos de esta gripe alertó a miles de personas.
Comentarios en Facebook como “en farmacias de Bérgamo no hay” o “las están enviando todas a China” se mezclan con aquellos que denuncian a negocios por haber aumentado considerablemente el precio de los barbijos.
Comprar un barbijo en Amazon cuesta 3 euros y distintos usuarios indican que intentaron hacerse de unidades pero están agotadas o tiene un retardo excesivo en la entrega del producto a raíz de la presencia de los primeros casos de coronavirus en Italia.
Otro representante del Gobierno en pedir calma a la población fue Roberto Speranza, ministro de Salud: “Habrá emergencia por seis meses, pero no es necesario que haya miedo”.
Riunione della task force sul coronavirus con la partecipazione del commissario straordinario Angelo Borrelli. pic.twitter.com/xamJaYWIa7
— Roberto Speranza (@robersperanza) February 1, 2020