Inicio Policiales Niño es olvidado por su padre en el auto y muere sofocado

Niño es olvidado por su padre en el auto y muere sofocado

Por la mañana del 19 de septiembre, un ingeniero de 43 años que trabaja en la Universidad de Catania, en Sicilia, en lugar de llevar a su niño en la escuela de la infancia y luego dirigirse a su trabajo, se fue directamente al estacionamiento de la universidad.

Salió del auto y lo cerró. Por las siguientes cinco horas no se acordó de su hijo, hasta que su mujer, una cardióloga del Policlinico, lo llamó alarmada por teléfono porque no había encontrado al niño en la escuela.

El hombre se precipitó al coche, donde vio al niño todavía atado a su sillita. A pesar de los intentos de reanimación, no se pudo hacer nada: el niño había muerto por el excesivo calor que se había alcanzado en el habitáculo del vehículo, ya que en Catania había una temperatura de hasta 35 grados.

La policía ha llegado en el sitio y prestado la primera ayuda a la pareja. Andrea Norzi, de la Justicia de la ciudad, ha abierto una causa por homicidio culposo.

En Italia el obligatorio desde 2018 que los vehículos estén equipados de dispositivos anti-abandono, pero todavía no ha comenzado a regir por un atraso en la decisión sobre las característica técnicas, que ha sido postergada a otro decreto de aplicación, para noviembre 2019.

Hace años se debate sobre la necesidad de poner tales dispositivos, ya que varias han sido las tragedias de niños olvidados en los coches por adultos desmemoriados, como la que pasó en la misma ciudad de Catania el 3 de julio de 1998, cuando un pequeñito de 20 meses fue olvidado en el coche por el padre por siete horas.

Los expertos hablan de amnesia disociativa: las personas a las que les pasa se olvidan totalmente de una parte de su vida, como el hijo pequeño que tiene que ser llevado a la escuela. No es falta de amor o de atención, sino, a menudo, el producto de una situación de fuerte estrés, que provoca un fallo en la memoria.

Las personas vuelven a acordarse de lo que había olvidado, en estos casos del hijo abandonado en el coche, tan solo cuando alguien o algo exterior se lo llama a la memoria. Y entonces llega la desesperación.

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