El piloto austríaco Niki Lauda falleció a los 70 años en una clínica de Suiza donde estaba internado a causa de problemas renales.
Lauda fue Campeón del Mundo dos veces con Ferrari, en 1975 y 1977. Ese primer título significó el corte de una racha con las vitrinas de Maranello intactas desde 1964.
Pero además de ser un gran piloto, Lauda es sinónimo de coraje y pasión. En 1976 sufrió en Nürburgring, Alemania, un accidente que provocó que su Ferrari se envolviera en llamas y con él dentro.
Quemaduras de 1er y 3er grado y daño severo en los pulmones hicieron que se pensara más en su muerte que en su supervivencia. Sin embargo, salió adelante y solo 40 días después de ese fatídico hecho retornaba a las pistas.
Es por eso que a través de Twitter, Ferrari emitió un mensaje hacia uno de sus pilotos más brillantes:
“Todos en Ferrari estamos profundamente tristes tras el conocimiento de la muerte de nuestro amigo Niki Lauda. Él ganó dos de sus tres campeonatos con nosotros y estarán siempre en el corazón de los ferraristas. Nuestras sinceras condolencias a sus familiares y amigos”
Everyone at Ferrari is deeply saddened at the news of the death of our dear friend Niki Lauda. He won two of his three world championships with us and will always be in our hearts and in those of all Ferrari fans. Our sincere condolences go to all his family and friends.#CiaoNiki pic.twitter.com/mbzZBNZiRZ
— Scuderia Ferrari (@ScuderiaFerrari) 21 de mayo de 2019