El Consejo de Ministros del lunes 20 de mayo fue realmente duro y sufrido para todos. Por algunas horas no se supo si habría o no, luego se decidió hacerlo en dos etapas, la primera a las 16 y la segunda a las 20:30.
Al comienzo la reunión se abrió y, después haber aprobado el balance de la región Piemonte, se suspendió de inmediato ya que el premier, Giuseppe Conte, no estaba todavía presente, como tampoco el vicepremier y ministro del Interior, Matteo Salvini, y el subsecretario de Estado, Giancarlo Giorgetti, que —como ya era sabido— no estaría tampoco por la tarde.
El orden del día fue notificado poco antes del comienzo por el premier: además de una actualización sobre las autonomías, el aspecto más importante fue el “comienzo del examen” del decreto familia, propuesto por el Movimiento 5 Estrellas, y del decreto Sicurezza bis, querido y sostenido con tenacidad por Salvini y la Lega. Ninguna aprobación, como esperaban los proponentes.
Lo único cierto a la conclusión de la reunión fue el nombramiento de Giuseppe Zarafana como jefe de la Policía Fiscal, Biagio Mazzotta a la contaduría general del Estado y Pasquale Tridico al Inps.
La reunión fue muy tensa: la Lega se opuso al decreto familia, mientras que apoyaba unas normas propuestas como enmiendas al decreto crecimiento, ahora al examen de la comisión de la Cámara, por el ministro Lorenzo Fontana — que, a pesar de ser el ministro de la familia, no ha sido contactado por Luigi Di Maio en la preparación del decreto.
Según el viceministro de economía, Massimo Garavaglia, los mil millones de euros necesarios como cobertura del decreto familia podrían usarse para neutralizar el aumento de la Iva.
Por el otro lado, los ministros del M5E acusaron el decreto Sicurezza de ser inconstitucional, a pesar de la introducción de una norma sobre repatriados.
Los textos fueron enviados para conocimiento al presidente de la República, el cual, según palabras de Conte, tendría reservas sobre el decreto Sicurezza bis. Salvini quería saber donde estuviera el problema, pero la reunión fue suspendida antes de la medianoche.
Luego, el vicepremier de la Lega expresó “plena disponibilidad en concordar eventuales modificaciones del texto, si necesario”, mientras los 5 estrellas afirmaron: “Tomamos nota de las críticas planteadas sobre el decreto seguridad y estamos listos para resolverlas lo más rápido posible, trabajando serenamente con la Lega. Esto hace un Gobierno responsable”.
