El secuestro del bus en Milán no terminó en una verdadera masacre gracias al accionar de este pequeño niño, que se convirtió en héroe y salvó la vida de todos sus compañeros que se encontraban abordo.
“Estábamos todos muy asustados”, dice el joven en una entrevista con La Repubblica.
“Tiró combustible por el piso, nos ató a todos y secuestró los teléfonos para que no avisemos a la Policía”, detalló
“Uno de los teléfonos de un compañero se cayó al piso. Entonces me desaté las manos, me hice un poco de daño, y llamé a los Carabineros y a la Policía”, agrega.
El miércoles 20 un hombre senegalés secuestró e intentó prender fuego un bus con 51 niños a bordo. “Basta de muertes de niños en el Mediterráneo”, gritó antes de ser detenido. Afortunadamente, nadie resultó herido de gravedad.
